jueves, 21 de mayo de 2009

María comprensiva


María: mujer de nuestro mundo,
Madre de todos los hombres.
Venimos a ti
para pedirte que enjugues nuestras lágrimas,
que des fuerza nuestros pies cansados,
que nos muestres el camino en nuestro destierro,
que nos des la paz,que nos lleves a Jesús,
tu Hijo y nuestro hermano,
que acompañes nuestro caminar,
que seas la vida para nuestras vidas muertas,
que pongas dulzura en nuestros tragos amargos,
que des esperanzas a nuestra búsqueda,
que nos reconfortes en nuestra sed.
Tú que sabes nuestra penas,
danos fuerza en el dolor.
Tú que conoces nuestras inquietudes,
danos el bálsamo de la paz.María,
que cuando estemos ciegos,
busquemos la luzy no nos quedemos en la oscuridad.
Madre, en los momentos duros, ruega a Dios por nosotros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La tristeza, el dolor, el sufrimiento, se hacen también realidad en nuestra vida.

En nuestro destierro, estamos perdidos y buscamos a alguien que nos tienda una mano.

Vivimos con falta de paz, con intranquilidades y entre angustias y zozobras y queremos la paz del Espíritu que nos da el auténtico consuelo.

Buscamos a alguien que tenga la experiencia del camino recorrido, que sepa por donde vamos.

En María podemos encontrar todo esto que vamos buscando. Ella fue mujer de nuestro mundo, de nuestro tiempo, de nuestra raza. Ella fue madre y entiende y sabe de todo.

Par nuestra vida cansada y monótona Ella es vida, dulzura, esperanza. Ella nos comprende, Ella sabe lo que nos pasa.

Acudamos a ella con confianza.