El nombre vulgar o común: Lirio azul, Lirio cárdeno, Lirio común, Lirio morado, Lirio Pascual, Lirio barbado.
Tiene flores grandes, perfumadas y formas espontáneas. Los tonos van del violeta al blanco, al amarillo y al rojo, con elegantes jaspeados. La hoja es acintada, erguida y de color verde claro. Le atacan plagas y hay que fumigarlas y algunas enfermedades se combaten quitando las hojas enfermas.
María como el lirio, no sólo tiene un nombre, sino que tiene infinidad de nombres, pero podemos preguntarnos ¿de dónde radica su grandeza, la fuente de donde nacen las gracias de las que Ella estuvo adornada? Podemos pensar que en su maternidad divina. Si nos limitamos solamente a considerar su maternidad, nos exponemos a contemplarla como una bella obra de arte. Como una imagen estática. Pero es Lucas (11,27-28) quien nos lo aclara en su evangelio cuando dice: “Estando diciendo estas cosas, alzó la voz una mujer, y dijo: ‘¡Dichoso el seno que te llevó y los pechos que te criaron!’ Pero Jesús dijo: Dichosos más bien los que oyen la Palabra de Dios y la cumplen”.
Esta mujer proclama, a María, por ser madre de Jesús según la carne,. Pero Jesús la proclama todavía más feliz por escuchar la Palabra de Dios y ponerla en práctica.
Canto: Estrella y camino prodigio de amor
Oración
María, en ti la Palabra cayó en tierra buena porque estabas bien dispuesta, bien cultivada. Te pedimos nos ayudes a preparar nuestra tierra y a acoger La Palabra de Dios; no conformarnos sólo con escucharla sino que la hagamos fructificar en obras de entrega, servicio y caridad a nuestros hermanos. Amén.
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